Como combinar los cuidados de un familiar y un cuidador profesional
Para ello podemos establecer tres pilares
Información:
Es necesario que compartamos toda la información del paciente con el cuidador: cuidados, medicamentos, información sobre la enfermedad que lo aqueja e información sobre las prestaciones médicas y servicios locales. La comunicación es la mejor forma de generar confianza y establecer parámetros a seguir entre ambas partes.
Control:
Sabemos que cuando no estamos en casa podemos llegar a sentir la pérdida del control. Pero no podemos dejar de trabajar, ir al supermercado o a una cita médica por miedo a que le pase algo a nuestros mayores. Cuando nuestros padres se encuentran con dificultades de salud debemos tener alguien siempre en casa. No podemos dejarlo al azar. Por ello contar con un profesional, aunque sea unas horas, debería brindarnos una mayor seguridad de que está en buenas manos.
El mejor cuidado:
Los miedos al no ser un experto, más si es un familiar directo, estarán presentes. ¿Estaré haciendo las cosas bien? ¿Y si se cae, cómo debo actuar? ¿Cómo trasladarlo de un lado a otro sin ayuda?. Son muchas preguntas que invadirán nuestra mente y la mejor respuesta siempre la encontraréis de la mano de un profesional. Hay muchas funciones básicas que solo un profesional en cuidado de personas mayores nos podrá enseñar para cuando no se encuentre cumpliendo sus funciones y seamos nosotros los responsables de nuestros padres.
Ambas partes son importantes, tanto la asistencia de un experto como la presencia de un familiar para darle mayor tranquilidad a nuestros familiares.
Contamos con servicios de asistencia a domicilio, limpieza y alimentación para acompañaros a vosotros y a vuestros padres.